Valeria Cossati vive sofocada por las convenciones sociales de la Italia de los años cincuenta, atrapada entre sus roles de esposa y madre. Presa de un impulso inexplicable, compra un pequeño cuaderno en el que anota sus reflexiones y donde comienza a revelarse lo insatisfactorio de su vida burguesa: en ese espacio prohibido que le proporciona la escritura van aflorando conflictos subterráneos y resentimientos ocultos.
Publicada originalmente en 1952, El cuaderno prohibido sigue resultando sorprendente por su modernidad y relevancia. Es un retrato magistral, capaz de desvelar la identidad fragmentada y cambiante del ser humano, además de un gran testimonio histórico de la época, que refleja tanto la crisis de los valores sociales e individuales como las encrucijadas a las que se enfrentaban las mujeres.
Alba de Céspedes, «un redescubrimiento único» (Die Zeit), reivindicada hoy por grandes autoras como Elena Ferrante, fue una de las figuras más sobresalientes de su generación. Escritora de éxito, se convirtió en un referente de la lucha antifascista, y a sus inquietudes feministas y políticas sumó un compromiso irrenunciable hacia la palabra, tanto desde el periodismo como desde la literatura. Dotada de una profundidad psicológica inusual, fue «una de las pocas autoras que ha conseguido establecer lo que significa ser mujer» (The New York Times).